Hay colores que encierran de por sí una gran carga mística. Entre ellos están el morado o púrpura. El morado se vincula con lo religioso, lo psíquico y con la meditación profunda y trascendental, generadora de cambios espirituales y de renovación.
Es también un color asociado con el ejercicio del poder y la autoridad, por lo que se utiliza en rituales para potenciar la toma de decisiones, la fortaleza y valentía, para actuar con los pies bien puestos sobre la tierra y sin trabas emocionales que nublen la razón.
Al igual que todo lo asociado con la escala cromática de los morados, y en la misma línea de otros dos tonos más claros como son el violeta y el lila, los artículos morados están relacionados íntimamente con el chakra del tercer ojo, es decir, el punto energético que tenemos en el medio de la frente, entre las cejas. Para activar este punto, en los rituales de meditación se suele concentrar la energía en este lugar para propiciar un estado calmado de la mente.
Cada año, las procesiones del Nazareno mueven a millones de feligreses en todo el mundo, los cuales visten túnicas moradas, pues es el color de estas conmemoraciones dedicadas a la imagen de Cristo portando la cruz. Es, por lo tanto, un color que nos conecta con lo divino.
Características de las velas moradas
Siendo un color espiritual y psíquico, que mejora la toma de decisiones sabias y otorga prestigio y elevación, hay objetos que pueden potenciar estos atributos innatos del color morado, como las piedras y velas.
La amatista es una piedra con esta tonalidad. Es muy usada para hacer meditaciones y favorecer la concentración. Puedes colocarte una piedrecita de amatista en el medio de la frente cuando estés acostado meditando, pues se le confiere poder para abrir la mente y conducirte a un plano de reverencia, dignidad, sabiduría y elevación espiritual.
La vela morada nunca falta en los rituales para pedir éxito en los nuevos caminos que se emprendan, así como para la consecución de prestigio, prominencia a nivel social y la consolidación de los deseos nobles del corazón.
Usos de la vela morada
Generalmente, la vela morada debe encenderse para completar rituales o meditaciones enfocadas en la atracción del poder y el prestigio, cualquiera que sea su campo: laboral, profesional, financiero o estudios.
Conéctate con este poder místico y positivo del morado para mejorar tus prácticas de meditación y concentración.
Hay quienes tergiversan su uso y recurren a las velas moradas como una forma obsesiva de tener poder y abusar de la autoridad.